En la recta final de #Salvemos a la Diosa Maat, os queremos hablar de aquello que nos ha movido a crear la campaña. El velero Diosa Maat está malito, y ya no puede navegar. Para poder salir este verano a realizar la campaña estival (que lleva ya más de diez años realizando) necesita pasar por el quirófano. Algunos arreglos se harán con financiación propia, otros con el dinero que consigamos de esta campaña. Otros, se han realizado ya con manos voluntarias... Vayamos por partes:
Durante los meses de marzo y abril, el barco ha recibido la visita de personas voluntaria que durante cuatro fines de semanas han dedicado su tiempo y su esfuerzo a ayudarnos de manera desinteresada. Cerca de 30 personas han contribuido a quitar todos los accesorios de cubierta (para que ésta pueda ser arreglada y pintada) y han lijado todos los portillos u ojos de buey (ventanas del barco) para que puedan arregalarse. A todas ellas: ¡¡¡gracias infinitas!!!.
En cuanto al trabajo profesional, contaros que también han empezado a realizarse con dinero propio de Ecologistas en Acción. Para empezar: sacar el velero a tierra firme. Después de esta tarea realizada con la ayuda de una grúa, se llevaron a cabo varios trabajos: serreo con arena del caso y cubierta (para quitar la pintura antigua), posterior lijado y dos capas de imprimación (el proceso que se necesita recibir para que la pintura se pegue bien).
El siguiente paso será recibir cinco capas de pintura en el casco, y poder reparar toda la cubierta. Esperamos poder superar el mínimo porque esto nos permitiria también arreglar el mástil para poder viajar a lugares más lejanos o hacer alguna reparación enfocada a la comodida de la tripulación.
Os dejamos una bonita selacción de neusrto velero en el hospital. Qué duda cabe que está en muy buenas manos;)